En una casita abandonada,
Una gata dio a luz,
Siete gatos nacieron,
Muy lindos y fuertes,
Con mucha energía,
Cuatro gatos,
Y tres gatas,
De colores diversos.
Su madre,
De ellos no se apartaba,
Lamiéndolos,
Lavándolos,
Mimándolos,
Y cuidándolos.
Un día, su madre,
A buscar comida fue,
Y los cachorros, solos se quedaron,
Mientras venía, uno de ellos,
En busca de su madre fue,
Con tan mala suerte,
Se perdió,
Y no sabía cómo volver,
Maullidos enviaba,
Pero de su madre, lejos estaba,
Se escondió, asustado.
Un perro callejero, se le acerco,
Y lo vio,
El gato le bufaba,
Mas el perro, prisa no tenía,
Poco a poco, se fue acercando,
Hasta que, confiado el gato,
Amigos se hicieron,
Acurrucados dormían,
En uno con el otro,
Los días pasaban,
El gato donde el perro iba,
Le seguía,
Un restaurante,
Con comida sobrante,
Les alimentaba.
Una linda niña,
Por allí paso,
Y encantada quedo,
De la unión de ambos,
Se llevo a los dos,
A su casa,
Calentita y alimentada,
Al veterinario, primero los llevo,
Y ya al día,
La convivencia comenzó,
Sus ricos piensos,
Agua y arenero,
El gato es feliz,
Y el perro,
Con sus salidas,
Alegre estaba,
Ambos, muy agradecidos,
A sus dueños,
A diario, se lo demostraban,
Al gato,
Afortunado, le llamaron,
Y al perro,
Suertudo,
En honor a su encuentro.
En cuanto a sus hermanos/as,
Y madre,
A una buena casa fueron,
Y bien cuidados están,
Con sus vacunas, y cuidados,
Buen futuro todos tuvieron.