¡Ay de las hojas que caen
y cual manto se tienden
en los jardines solos
sin que nadie las mire!
¡Ay de las hojas triste
que tienden su agonía
en el sombrío estanque
de una vieja abadía!
¡Ay del lamento que trae
consigo el crujir de hojas
en un otoño que cae
oculto entre las verjas!
Este dolor que canta
aquesta mi pobre alma
es un dolor que brota
en cuatro chorros de agua.
¡Ay de las hojas que caen
y sin amor me dejan!
¡Ay desta mi pobre alma
que muy triste se aleja!