Llevamos tiempo hablando y te has quedado grabado en mi pensamiento. Ha pasado tanto, y nada ha cambiado; todas las noches te sigo esperando.
No quiero vivir en un sueño, pero por más que duela, no pienso olvidarlo. Quiero contarte bajo la luna, susurrarte al oído las cosas que por ti siento. Y si voy a morir en el intento, que mi recuerdo viva en ti.
Por más que duela, no quiero olvidarte, ni siquiera puedo pensar en alejarme. Eres el remedio de todos mis pesares, eres mi cielo y eres mi infierno.
Cuando te vi por primera vez, supe lo que era enamorarse de un ángel. Tus ojos, tu voz, tu hermoso corazón... aquello se quedó grabado en mi interior.
Nadie manda en su corazón, déjame vivir en el tuyo. Todos los días lo acariciaré para que se acostumbre a que estaré ahí. Me acurrucaré y le contaré de mi amor hasta que palpiten como uno solo.