el vapor del café se desvanece en mi rostro y yo con mi taza en las manos,
a lo lejos dibujo tu silueta viniendo hacia mi,
con desesperación y latidos que casi abren mi pecho llegan recuerdos tuyos a mi mente de lo mas dentro de mi,
me paralizo por un momento, doy un sorbo y vuelvo a la realidad y por la ventana solo veo gente caminar aprisa por la lluvia que cae,
y tu sigues en mi mente en cada sorbo de café, en cada gota de la lluvia y en cada respiro.