Tú escribes desde la nada
imprimes color a tu arte
conejos, fuentes o hadas
que no van a ninguna parte
y reviven, sin embargo
en la pasión de tus manos.
Dios ha quedado perplejo
al ver que ni una letra sobra
recorriendo bien la hoja
los grafemas se me arroban
hay emoción en la tipografía
de mis letras incipientes
y conmoción en mi mente.
Letras heroicas modelaste
con tinta de amor atrapaste
la testarudez de las sombras
confiscaste las sonrisas
la inteligencia pregona
la admiración que se agita
en el cautiverio de tus obras.