Mari.o

SENDEROS DE LUZ

SENDEROS DE LUZ

Altos montes de misterios,

puertas abiertas. Habitáculos

de tigres, monos y dragones. 

Laberintos de jardínes

de mansas y perpetuas aguas

donde los remos aran los lagos.

Melocotones, arces y cerezos

dispuestos como miles de brazos

en auxilio. La espesa niebla desciende

cual incienso sobre el eterno

verdor de los cipreses, los cubre

con sus luengas y crespas barbas.

Desde cientos de acres, se escucha

el ulular compasivo de la gran cordillera.

Un aire fresco que refresca el aliento

e invita a seguir ascendiendo.

 

\'La fatiga de ir cuesta arriba

no es empresa fácil\'.

 

A ratos tañen pequeñas campanas

como el rielar de las estrellas que dormitan.

 

A ratos como los bambues y flautas

en una primavera que eclosiona en lotos

extendidos por toda la comarca.

***

 

Tal vez puede que haya algo más arriba.

 

(...) Algo...

 

todavía un algo

que ansía ser un algo descubierto.