ivan semilla

Hay un hombre que ama

Hay un hombre que viste el calvario en sus ojos

que se pinta de ojeras el color del insomnio

que se muestra cansado

que se muestra dolido

que se entrega sin fuerzas

al rincon del olvido.


 

Hay un hombre extraviado,

hay un hombre perdido

que agoniza de amores

por ser recto y preciso.

Por llevar en sus manos

la verdad en valores;

por llevar los honores

de querer con atino.


 

¡Pobre hombre, pues ama!

y hoy, no tiene destino.