_El barco de las cucharas_
Recubrí con cucharitas
un barquito de papel,
y partí con mis juguetes
a explorar el amanecer.
La espuma era de nata,
las olas de algodón,
el viento olía a galletas
y a tostadas con limón.
Navegamos entre risas
sin brújula ni señal,
por el mar de los inventos,
que siempre ama buen final.