Desde el mar Mediterráneo, en absoluta paz y calma…
Por el arte del vivir.
Porque vivir no es esperar,
es un camino de rosas
y espinas…
de experiencia y aceptación.
Es un milagro y una
oportunidad,
un río que a veces
fluye revuelto, y otras calmado.
Un regalo del tiempo,
una ocasión para evolucionar,
una oportunidad para
crear una y otra vez…
¡La mejor versión
de uno mismo!
Porque lo que no se compra,
no se ingiere ni
se obtiene de afuera…
nace de la armonía entre
la mente y el interior.
Sin la necesidad
de ningún cielo,
de haber muerto
o de un descanso eterno.
Ante el silencio de tus propios
silencios, semillas,
cosechas y frutos…
Camino recorrido,
disfrutado y padecido,
y todo lo que te queda
por enfrentar, disfrutar, vivir y experimentar...
¡Pura vida y a por más!
¡Sí, pura vida y a por más!