Cuántas veces te tuve en mis sueños
por las noches, y me despertaba
rayando el sol,mis días son felices y
otros con nostalgia.
Siempre esperaba que llegaras
y me iba al trabajo, traía el sustento
para la casa y tu ausencia como
me dolía en el alma, tal vez mi Dios
escuchó mis plegarias.
Ruego que si tú no vienes me de
el valor para arrancarte de mi pecho
y así que pases al olvido y tener mi
vida en plena calma.
Hoy solo le agradezco a mi Dios
que mis días son de paz y por las
noches en plena calma y mi despertar es todo felicidad.