Oye esa voz interior
que va marcando el sendero,
es un guía muy sincero
que nos induce al amor;
vive un intenso fervor,
el apoyo verdadero
en ese ser que venero
pues me libró del dolor;
es la luz, plena conciencia,
el sublime redentor:
alba senda de verdad;
de este escenario, la esencia,
auténtico salvador:
es nuestro fin, libertad...