Poeta De La Otra Esquina

Todo ese jazz y ningĂșn lector.

Todo ese jazz y ningún lector.

La Winehouse a estas hora fuma y fuma,
las hiedras huyen de su propio enigma,
y vos cansado no podés leerme.

A estas horas.
las tres de la mañana con veintiún minutos.
sacudiendo el alba de las sales,
trepidando de las últimas enseñas.

Y Rodrigo Lira se desata algunos nudos
en esos brazos jóvenes con el filo de un secreto.

A estas horas,
dándole a los astros un poema,
y esto es estúpido e inútil.

Porque cae el marasmo
ante la piedra inservible.

Hace un ruido quejoso
la misma noche.

Y Goytisolo la aspira,
suavemente.