Enhebrando los puntos y las comas,
se guardaron mis diálogos – entre rayitas-
No quiero que me cambien las palabras
porque a mi lenguaje y esencia, las modifica.
Sacudiendo un poco mi conciencia
de prolegómenos y referidos
llevo paréntesis en mis solapas
y algunas comillas en los bolsillos
decir lo que siento es mi fuerte
con predicado dócil o sustantivo.
Si las exclamaciones no se ofenden
utilizaré más puntos suspensivos
exponiendo de este modo irreverente
y advirtiendo lo prohibido
- ¿Me pregunto?
- ¿Quién lo ponió ahí, lo escribido?