Luna llena esta noche,
muy brillante, galante;
pero triste la sentí.
A lo lejos escuché
su canto nostálgico,
pensativa y en llanto
callaba su mirada,
inocente y enamorada.
Observé sus lágrimas.
Lágrimas de luna,
se derramaron esta noche.
Los mares y yo fuimos testigos:
lloró y lloré con ella.
La abracé mientras oraba,
me besó y me dio las gracias.
Suspirando dijo: no digas nada,
solo escríbeme, seré tu amada.