Al llegar al Instituto Jefferson, Dania se detuvo frente al edificio principal, mirando hacia arriba con una mezcla de emoción y nerviosismo. La fachada del instituto era imponente, con columnas altas y ventanas grandes que parecían brillar bajo el sol de la mañana. Dania respiró profundamente y se ajustó la mochila en los hombros, intentando calmar sus nervios.
Mientras caminaba hacia la entrada, murmuró para sí misma: \"¿Cómo lo haré? ¿Y si no hago amigos? ¿Y si me pierdo en el campus?\" De repente, una voz amable interrumpió sus pensamientos.
\"Hola, soy Katherine. Mucho gusto. ¿Eres nueva por aquí, verdad?\"
Dania se volvió hacia la chica que le sonreía y se sintió aliviada al ver su expresión amistosa. \"Hola, soy Dania. Sí, soy nueva. Necesito encontrar la inspectoría. ¿Puedes ayudarme?\"
Katherine asintió y se ofreció a acompañarla. Mientras caminaban, Dania se sintió más cómoda y comenzó a charlar con ella sobre su situación. Después de unos minutos, llegaron a la inspectoría y Katherine se disculpó para ir a su clase de ciencias.
\"Te dejo, Dania. Tengo que ir a clase. La profesora Denis no es muy comprensiva con los atrasos\", dijo Katherine con una sonrisa.
Dania sonrió agradecida. \"Gracias por tu ayuda, Katherine. Me alegra haberte conocido.\"
Con una última sonrisa, Katherine se fue corriendo hacia su clase. Dania la vio desaparecer en la multitud de estudiantes y se sintió un poco más segura al saber que ya conocía a alguien en la escuela.
Respirando profundamente, Dania entró en la inspectoría para registrarse y comenzar su primer día en el Instituto Jefferson. La secretaria la recibió amablemente y le entregó su horario y otros documentos importantes.
\"Tu clase de ciencias es ahora\", dijo la secretaria. \"Te acompañaré para que te presentes.\"
Dania siguió a la secretaria por los pasillos hasta llegar a la sala de ciencias, donde vio a Katherine sentada en una mesa cerca de la ventana, sonriendo levemente al verla.
Dania se sintió un poco más aliviada al ver a Katherine, y se dirigió hacia ella con una sonrisa. \"Hola de nuevo\", susurró, intentando no llamar la atención del profesor.
Katherine sonrió y señaló la silla vacía junto a ella. \"Siéntate, te estaba esperando\", dijo en voz baja.
La profesora comenzó a hablar sobre el plan de estudios y los objetivos del curso, pero Dania no podía evitar sentirse nerviosa y distraída. Intentó concentrarse en lo que estaba diciendo el profesor, pero su mente seguía divagando sobre lo que podría pasar en su primer día de clases.
Para su sorpresa, Ethan se encontraba allí, observándola desde la distancia con una mirada intensa que parecía apreciar cada uno de sus movimientos. Dania no notaba su presencia, y él no se atrevía a acercarse. Las clases comenzaron, y la oportunidad se esfumó. Cada momento parecía pasar más rápido que el anterior, mientras Dania se perdía en el laberinto de pasillos y aulas.
Las horas transcurrían con lentitud, y Ethan se encontraba cada vez más impaciente. ¿Por qué no podía reunir el valor para acercarse a ella? ¿Qué pasaría si lo hiciera? La incertidumbre lo consumía.
De repente, un pequeño accidente cambió todo. Dania tropezó en la salida, y sus miradas se cruzaron en un instante. Ambos se enderezaron rápidamente, avergonzados por la repentina e inesperada proximidad.
\"Lo siento mucho, no me fijé dónde iba\", murmuró Dania, sonrojada.
\"No te preocupes, son cosas que pasan\", respondió Ethan con una sonrisa calmada.
Luego, en un tono más familiar, preguntó: \"¿Cómo estás, Ethan? No te había visto por la escuela\". Él se sorprendió al escuchar su nombre en sus labios.
Una risa nerviosa escapó de sus labios, y un \"sí\" apenas audible salió de su boca. Mientras tanto, Katherine se acercó a ellos con curiosidad.
\"¿Se conocen?\", preguntó, mirándolos con interés.
\"Sí, somos vecinos\", respondieron al unísono, con una sonrisa compartida.