Hernán Mejía Silva

OTOÑO

El destino predecible,

con camino trazado y correa en mano,

el sol olvidó como calentar el otoño,

aún así, tras el gris cristalino,

algún rumbo encontramos,

para encontrarnos…

 

Hoy miro un poco distinto,

azul diáfano y verde marchito,

los otoños son poéticamente crueles por definición inexacta…

no, nunca supe decir adiós, 

pero sí hasta mañana,

después de la media noche,

cuando el frío se robe todo.