Mari.o

NOCTURNA IMPETRACIÓN

De noche,

en esta barca perdida

que por las noches deambula

por tenebrosos mares . 

 

A veces

alumbrado 

por mortecinos faroles

que husmean la fría 

y silenciosa ventana. 

 

[El eco, es donde el corazón

encuentra su danza]. 

 

II 

Tus ojos se abren como portales

que esgrimen verdades ocultas. 

 

Arado del alba 

que desvanece las tinieblas

de la noche.

 

Montes de obeliscos, 

mustios astros, 

 

cuales parpados que tiritan 

como esos pequeños pétalos 

de perfumada blanca flor. 

***

Estremecidas... 

 

abriendo sus corolas

al calor del aliento

que las evoca.