racsonando

¡Hay una urgencia!

 

🪇¡Hay una urgencia!🪇

 

🎭 Coral Poética: ¡Hay una urgencia!

✍️👀✍️

hay una urgencia de ojos,
hay una urgencia de manos,
hay una urgencia de piernas,
hay una urgencia de brazos,
hay una urgencia de voces,
hay una urgencia de hombres,
hay una urgencia de todo,
¡Hay una urgencia!

cuando el hombre dejó de ser hombre,
porque su palabra falla,
porque la nada es su credo,
porque es más lo que arrastra
y porque lo ambiciona todo;
porque lo destruye todo,
aunque camine en el lodo.

hay una urgencia en la nada,
cuando la nada es el ego,
si nuestra voz ya no es  eco
y se dibuja con odio.

hay una urgencia de alma,
de fe, de abrazo, de asombro,
de volver a ser palabra
y no murmullo sin rostro.

hay una urgencia de canto,
de pan, de techo, de nombres,
de mirarnos sin espanto
ni etiquetas ni uniformes.

hay una urgencia sencilla,
como el beso o como el llanto,
como el niño que no miente,
como el árbol que resiste tanto.

hay una urgencia, compañeros,
de limpiar el aire y el miedo,
de inventar otra manera
de ser humanos de nuevo.

hay una urgencia de abrazo,
de tierra limpia y sincera,
de un “buenos días” que pese
más que una guerra entera.

hay una urgencia de aurora
en medio del desconcierto,
de aprender a ser refugio
y no frontera ni desierto.

hay una urgencia, hermanos,
de corazón y memoria,
de escribir juntos la historia
que nos devuelva las manos.

porque aún late la ternura,
aunque el dolor nos acose,
y mientras quede un “nosotros”,
ningún final será noche.

Racsonando Ando.

Adaptación para coral poética

 

(Inspirada en Mario Benedetti – versión coral expandida para voces juveniles)

Apertura — El llamado

(Luz tenue. Silencio. Los coristas avanzan lentamente desde los costados. Una voz se alza.)

VOZ A (firme, pausada):
¡Hay una urgencia!

CORO (con fuerza contenida):
¡Hay una urgencia!

VOZ A:
Hay una urgencia de ojos,
de mirar distinto,
de ver al otro sin miedo,
sin juicio, sin prejuicio.

VOZ B (más suave, reflexiva):
De mirar el dolor ajeno
como quien se mira por dentro,
de abrir los párpados del alma
y dejar pasar el viento.

CORO (creciente):
¡Hay una urgencia de ojos…
para volver a vernos!

(Breve silencio. Un paso hacia adelante.)

Las manos

CORO (con energía):
¡Hay una urgencia!

VOZ A:
¡Hay una urgencia de manos!
para sembrar, para curar,
para alzar al que tropieza
y aprender a acariciar.

VOZ B:
De manos limpias y francas,
que no teman la bondad,
que trabajen sin cadenas
y construyan dignidad.

CORO (en crescendo):
¡Hay una urgencia de manos…
que no se cierren jamás!

(Pausa. Los coristas levantan lentamente las manos abiertas hacia el público.)

 

Las voces

CORO (a media voz, como eco):
¡Hay una urgencia!

VOZ A:
¡Hay una urgencia de voces!
que digan sin odio ni miedo,
que nombren la vida entera,
que hagan del silencio un credo.

VOZ B (más intensa):
De voces que no se vendan,
que no callen lo injusto,
que sean puente y consuelo,
que iluminen lo oscuro.

CORO (fuerte, unánime):
¡Hay una urgencia de voces…
que despierten el mundo!

El alma

CORO (más lento, profundo):
¡Hay una urgencia!

VOZ A:
Hay una urgencia de alma,
de fe, de abrazo, de asombro.

VOZ B:
De volver a ser palabra
y no murmullo sin rostro.

CORO:
Hay una urgencia sencilla,
como el beso o como el llanto,
como el niño que no miente,
como el árbol que resiste tanto.

(Movimiento circular; los coristas forman un semicírculo.

La esperanza

CORO (ritmado, como marcha suave):
¡Hay una urgencia!

VOZ A:
Hay una urgencia, compañeros,
de limpiar el aire y el miedo,
de inventar otra manera
de ser humanos de nuevo.

VOZ B (con emoción):
De decir “buenos días” y que pese,
de tender la mano entera,
de creer en lo pequeño
que cambia la primavera.

CORO (entonado, casi cantado):
¡Hay una urgencia de abrazo,
de tierra limpia y sincera,
de un saludo que valga
más que una guerra entera!

 

VOZ B (con emoción):
De decir “buenos días” y que pese,
de tender la mano entera,
de creer en lo pequeño
que cambia la primavera.

CORO (entonado, casi cantado):
¡Hay una urgencia de abrazo,
de tierra limpia y sincera,
de un saludo que valga
más que una guerra entera!

La aurora

CORO (suave, ascendente):
¡Hay una urgencia!

VOZ A:
Hay una urgencia de aurora
en medio del desconcierto,
de aprender a ser refugio
y no frontera ni desierto.

VOZ B:
Hay una urgencia, hermanos,
de corazón y memoria,
de escribir juntos la historia
que nos devuelva las manos.

CORO (claro, vibrante):
¡Hay una urgencia de aurora…
de amanecer sin miedo!

 

El “nosotros”

(Pausa larga. Las voces se apagan hasta quedar una sola.)

VOZ A (muy suave):
Porque aún late la ternura,
aunque el dolor nos acose…

VOZ B (subiendo lentamente):
Y mientras quede un “nosotros”,
ningún final será noche.

CORO (final, con todo el cuerpo):
¡Hay una urgencia!
¡Sí!
¡La de seguir siendo humanos!