Pablo Sanz Otal

Libertad

Dos pájarillos

uno libre, otro prisionero.

 

Tengo un pájarillo que canta

y lo hace cada mañana

no sé si está alegre o triste

pero canta, canta, canta.

 

Luego recibe respuesta

de una pájarilla mundana

que por allí vive o por allí pasa.

 

No sé que dicen pero hablan

dirán que quisieran verse

se dirán cómo es su casa.

 

El mío, que la suya es jaula

limpia y organizada.

Que come siempre semillas

y verde lechuga no le falta.

 

Que se encuentra muy sólo

y no mueve las alas.

Con anhelo le pide

que vuele por su ventana.

 

No, no, ella no tiene jaula

sólo dispone de un nido

en época de crianza.

 

Es libre la pajarilla

recorre grandes distancias 

hasta donde su vista alcanza.

 

Le cuenta como es su vida

donde va por la mañana

los insectos que prefiere

las semillas de temporada.

 

En buen tiempo tiene comida

en invierno pasa gana.

 

Los dos callan y piensan

si prefieren la otra baza.

 

La pájarilla no duda

no cambia de casa.

 

Mi pájarillo calla

mi pájarillo está triste

yo triste porque no canta.

 

Abro la puerta de la jaula.

 

Que cada uno escoja su estancia.