Carol Elizabeth García Carroz

Y si te pienso, me despienso...

Y si te pienso, me despienso.

Me olvido de que muero un poco cada día,

Y siento que contigo rejuvenezco, que se detiene el tiempo.

Que los tictacs del reloj se paran y nos dan permiso de vivir sin preocupaciones,

el reloj mismo nos deja el camino libre, para observarnos sin o con un millón de razones,

con ruborizaciones, con palpitaciones, con colores y sin distracciones.

Si te pienso, me olvido de las otras labores y me quedo perdida en ti, 

me pierdo en la luna o el sol que brilla en tus ojos,
en lo radiante de tu piel,
en lo largo de tu cabello y como me provoca tanto dormir en él,
me pierdo tanto, que a veces no me encuentro, 
porque te pienso y me quedo sumergida como en otro universo,
abrumada con la inmensidad,
atónita nadando entre la belleza,
me quedo hipnotizada en medio de las tonalidades, los matices y las estrellas,
de las galaxias qué hay en cada esquina, y como sabes que es imposible en una vida explorar todo el panorama.

Es tan complejo todo lo qué hay en ti, que sé que es improbable en esta vida totalmente comprenderlo,
pero no me importa, y estoy dispuesta a perderme más en todos los intentos,
a dejar a un lado la cordura, o perderme cuánto haga falta para tal vez en ti volver a encontrarla. 

Si te pienso, me despienso, me olvido del hambre o del sueño, y se activan todos mis sentidos a extrañarte, 
quererte, 
anhelarte, 
desearte aquí, 
a mi lado, 
sin más nadie, 
siendo, 
existiendo, 
viviendo, 
sintiendo, 
que no falta nada más, 
que estamos en el mejor lugar, 
en nuestro sitio seguro donde podemos ser y estar, 
reír y llorar, 
hablar y cantar, 
aventurar y explorar, 
donde podemos abrir nuestros mundos, 
dejar salir nuestros miedos y nuestros pensares más profundos,
donde podemos desclasificar nuestras páginas ocultas mas resguardadas, 
donde podemos sentir la mayor calma, 
la más sincera calidez recubriéndonos el alma…

Siento cuando te pienso, que no te falta nada más, 
que eres tal cual lo que necesitas ser,
y que me dolería la piel, las fibras más ligeras que me componen,
si llegaras por alguna razón a ultrajarte, cambiarte o alterarte
porque así tal cual, eres la dosis perfecta que cualquiera necesita para tener suficiente de ti, 
un poco más y alguien podría meterse en problemas, 
pues lo que tienes ya es suficiente para dejarme así, 
irremediable, 
demente, 
asombrada y extasiada, 
curiosa y apegada, 
a ti amarrada, 
como la primera vez que te vi y contigo pude tener un intercambio de palabras, 
la vulnerabilidad hizo acto de presencia, y sentí que si sostenía la mirada más de unos segundos en tus ojos, 
terminarían aterrizando mis labios en los tuyos, y tal vez como nadie lo ha hecho aún,
tal vez como todos debieron haberlo hecho, 
con sincero amor y admiración, 
con una mágica contemplación de tu belleza, 
y como si fuese el primero y el último beso que te diera, 
inolvidable, trascendental, 
sublime, etéreo, 
como se lo merece alguien como tú... 
un beso que es tan potente como hacer el amor, 
pero más simple porque se logra en unos instantes y sólo así, 
en unos pocos minutos, puede hacerte volar, 
perdiendo la cabeza, como en otro mundo, 
u otro idílico planeta, quedando flotando por lo aires, 
preguntándonos como no lo habías vivido antes, 
y porqué había sido tan difícil llegar hasta aquí. 

Aun no te beso y que misterio el de besarte, 
sentir tus labios reposados en los míos teniendo un hermoso baile, 
tímido pero vívido, 
amable e inefable, 
dulce como la miel y a la vez indescifrable como la misma miel, 
porque, 
si solo entrar a la parada del tren que lleva a ti es tan mágico, 
como se sentirá entrar en ese tren y contemplar el tour de tus paisajes, 
llegar a los más recónditos, 
a los más íntimos, 
los más auténticos y tan tuyos, solo tuyos, 
que espero puedas compartir conmigo,
para terminar de perderme, o de encontrarme, 
no sé la respuesta pero es largo este viaje corriendo sobre el arcoíris para ver qué hay al final de él.

Y entre tanto pensarte y despensarme,

Creo que algo sabemos, ¿Pero qué tanto más sabremos?
Creo que solo quedándonos cerca,
bastante cerca, 
lo viviremos y entenderemos, 
descifraremos y saborearemos, 
lo descubriremos, y quedaremos con ganas de seguir descubriendo.

Yo estaré cerca, siempre cerca, tanto como me permitas estar, y llegaré tan lejos como me permitas viajar en tus rutas.

Hay tanto que tenemos que enseñarnos tan sólo mirándonos a los ojos, susurrándonos al corazón, 
tan solo tomándonos las manos mirando al techo o las nubes en el cielo, 
tan solo acurrucándonos entre melodías, tan solo jugando entre nuestros labios, degustando el privilegio de besar lo que expulsa día a día todo lo que llevamos dentro, esos pensamientos y sentimientos que nos hacen ser nosotros y más que nosotros, nuestros, porque, yo ya soy tuya, a ti me entrego, ¿Lo serás tú de mí, acaso ya te tengo?, en todo este pensarte y despensarme, me pregunto eso, pero sé que todo se resuelve viviendo, experimentando a flor de piel cada segundo. Yo sin duda Estoy dispuesta a vivir esta historia, la que sea que sea esta.
Como cual poema escrito a pulso por tu puño y mi letra.
Y espero que ese poema sea lo suficientemente grande para contener todos estos universos, los tuyos, los míos, los que crearemos, lo bueno es, que las líneas serán tan infinitas como las dejemos.

13 de Abril del 2025
CaeliPaper
❤️

 

De un poeta a otro 🫂