Carolina Ugas Pazos

Las aguas del Diablo

Llegan sus aguas

sus aguas negras de lluvia

de lluvia ácida y de limo

verde limonada de la vesícula

de la canícula, o tal vez,

según la opinión de muchos,

es la saliva de sus encías.

 

Me han diagnosticado

pereza y opulencia.

La primera es cosa cierta,

la segunda es maledicencia.

 

No estoy melancólica a medias,

estoy medianamente torva

en las sienes anudadas con pañuelo,

taquicardia y jaqueca.

 

Dulce fruta fermentada

ábreme paso,

sácame el hueso del fastidio,

envuélveme con tus memorias.

 

Aguas del Diablo

aguas oscuras, aguas frías

aguas vacías, aguas impuras

aguas por venir y llegar

aguas por volver y decidirse.

 

OLLIN

25/11/2010