Hoy solo quiero agradecer por lo que viniste a entregarme
gracias por los besos, por los abrazos, por las risas y las caricias
gracias por regalarme estos años de tu vida
por los desvelos y los desayunos
también por los retos y por las caídas.
Gracias por haber sido el amor de mis días
por acompañarme siempre en los días tristes.
Por tu transparencia y por tu osadía
de quedarte ahí aunque a veces dolía
te agradezco tanto por tu amor sincero
y por darlo todo sin cuestionamiento.
Diste lo que tenías y hasta que pudiste
gracias amor, hoy no estés triste
te amaré por siempre y contaré la historia
de este amor profundo que conoció la gloria
y de aquella huella que grabaste para siempre en mi memoria.
Mi promesa intacta quedará guardada
de amarte siempre, aún a la distancia.