SONETO
Sumergido en la noche del olvido
y hundido en la resaca del desprecio
yo soy velero sin puerto ni precio
sin destino a la deriva perdido.
Me quisiste con luz, pero hoy hay bruma,
mis pupilas no tienen ya aquel brillo
en la marea del vacio sin guillo
y la dicha de ayer se vuelve espuma.
No obstante al marcharte dejaste un, guia
pues sabes que vendré por tu calor
en donde acabe mi horrible agonía.
Y si el tacto pasado me domina
y tú anhelas mi extraña compañía,
que la amistad nuestro frío termina.
EnLaMareaDelVacío
©Violeta