Rubaria, el Hada de Rubén Darío
Yo soy la pluma que canta y vuela,
la rima azul que nunca cesa.
Mi ahijado escribe con luz de estrella,
su verso es templo, su voz, promesa.
Rubén nació de un cisne de Azul,
de un sonetillo que quiso arder.
Su alma es ritmo, su arte, abedul,
su verbo es oro que sabe prender.
Lo vi soñar con mármol vivo,
con ninfas dulces y dioses mil.
Y en cada estrofa, ví su motivo,
su musa bella, su abril sutil.
Yo soy su hada, su protectora,
la que bendice cada canción.
Donde hay belleza, soy la aurora
que lo corona sin condición.
Que nunca muera su armonía,
que nunca calle su cristal.
Rubén es excelso,es poesía,
es rey del verso universal.
Annabeth Aparicio de León
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