CASTILLO EN RUINAS
Algunos le llaman karma
otros, justicia divina
cuando la suerte se inclina
en favor del agraviado.
Del destino no ha escapado
aunque esconderse pretenda
de aquel que sin más ofenda
por sentirse superior.
Dos cosas tiene el amor
que no las compra el dinero
la primera es ser sincero
la segunda es la pasión.
Si se paga con traición
el cariño que nos dieron
el amor que nos fingieron
se vuelve cardos y espinas.
Un castillo ya hecho ruinas
no se vuelve a levantar
es querer secar el mar
regresar arrepentido.
Porque aquel al que haya herido
si le concede perdón
lo ha de hacer por compasión
o falta de dignidad.
El rencor se hace piedad
y la piedad se termina
ya Karma o cosa divina
hace que suceda igual.
Un amor artificial
los une como pareja
y les dejo moraleja...
¡Regresa para estorbar!
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