Es el sol, que el día calienta,
La luz, que me guía,
Mi alegría de vivir.
Mi esposa, por el buen camino,
Me guía, y me conduce,
Es la persona, qué en mi corazón,
Una flor, sembró,
Muy linda y bella,
Que riego, todos los días.
Mi esposa,
Es mi alma gemela,
Preciosa, hermosa y bella.
Mi esposa,
De mi vida, forma parte,
Y muy orgulloso, de ella estoy.
Nuestro barco, flota,
En mareas malas,
Y buenas,
Y siempre victoriosos salimos,
Convertidos en uno,
Los dos.
Mi esposa,
Es el ángel, que dios,
Me envió, es mi compañera,
Mi psicóloga, mi reina,
Y sobre todo, mi amor.
Unidos, todo solucionamos,
Sin discusión,
Tan solo hablando.
A mi esposa,
Buenas comidas, meriendas,
Y cenas, le preparo,
Que, con gusto, la degusta.
Todo lo mejor, le doy,
La cuido, igual que ella a mí,
Muchas cosas, en común tenemos,
Con una mirada,
O con un gesto,
Sabemos lo que pensamos,
Y lo que queremos.
Mi esposa, para mí,
Es todo, en cada momento,
Me llena de esperanza.
Sin ella, la vida,
Es un sin sentido,
Y con ella, hasta el final,
Pienso llegar,
Pensamos llegar,
Si lo quiere dios.