!Ay de aquel! Que quiso ser
ese lobo entre corderos
y al aullar, sonó a carnero
Al derecho y al revés
pobrecito quien rugió
por espantar las ovejas
y se quedó como hiena,
cuando quiso ser leon.
!Ay de aquel! Que sin saber
quiso enfrentarse a la fiera
que duerme en mi interior,
no soy lobo ni león
no soy oveja ni hiena
solo soy la comadreja
la aleta del tiburón,
!ay de aquel! Que con sus letras
ponga en duda lo que soy,
porque llevo la bandera
de los versos y poemas
por donde quiera que voy,
!ay de aquel! Que no lo sepa.