Caramelo de limón

Entre lo que queda de ti

Hace tiempo que no te veo.
Prometí no olvidarte,
pero el tiempo insiste.

Aunque trato de atesorarte,
tu aroma ya se mezcla con el polvo,
y este lugar apenas recuerda tu sombra.

Veo la calle, y todo cambió.
Solo esta casa sigue igual,
como si esperara tus pasos.
Sé que no podrás volver,
pero aún dejó la puerta abierta.

No entiendo por qué el reloj se detuvo,
ni por qué el espejo ya no me reconoce.
Quizás tu ausencia me ha vaciado.
Afuera el sol brilla,
pero en mí sigue lloviendo.

Camino por calles extrañas,
llego al parque que amabas.
Hay una maceta rota,
una rosa vencida por su raíz.
No sé por qué, al verla pensé en ti,
y corrí de vuelta a casa.
No soporté perderte otra vez.