K. C

Sueño azul

Desde que era una niña, solía fantasear mucho, pero sin duda mi momento favorito era cuando mi madre colocaba una sábana afuera, y sabía que llegaba el momento de poder estar acostada en calma, mientras mi mente volaba más alto que cualquier cosa. Es algo tan hermoso que ha perdurado hasta ahora, porque algunas mañanas, cuando olvido, por un instante —solo por uno—, lo bella que es la vida, tomo un segundo para ver al cielo… pero solo si es azul.

 

Entonces, cuando veo a alguien sintiéndose miserable, pienso: quizá ha olvidado que el cielo es azul.