Poeta vivente

Frío

Y empecé a “pensar”, y el frío
me comenzó a abrigar; me
sentía lleno en ese vacío,
y sentía que todos mis problemas
se desvanecían.

Pero recordé que el frío engaña.
Pero recordé que el frío mata.
Pero recordé que el frío encarcela,
y a mí me encanta ser libre.

Pero recordé lo frío que es el frío.

Y dejé de “pensar” y comencé a vivir;
al final, eso es más cálido.