Andando por la cuesta de la vida
no se si bajando o subiendo
con esta mochila cargada de vacío
siento el inmenso peso de la soledad
el olor de lágrimas rancias perfuma
el camino.
A donde voy?
A la nada donde termina todo
construimos sueños que se marchitan
y son devorados en este desierto de inutilidad. -
Atrás quedan esos recuerdos que
un día también se irán
Amigos, amores. odios y temores
se van íendo, como el aroma del
café en el pleno invierno.
Con cada ida, se torna mas pesado
el vacío,
más lento el camino,
más cobarde el espíritu para saltar
hacia el fin. -
Y seguimos ora a gatas,
Ora con frio y deseamos el llegar
Mas no apuramos el paso
Intuimos el final, mas no queremos
admitirlo.
Esperanzas se aferran como arañas
sobre la piel y a veces recordamos
que una vez jugamos como niños
y nos perdíamos en los sueños. -