ÓRBITA
Tu mirada lo altera todo:
el mundo aprende a girar de pronto,
y en ese instante perfecto,
hasta la luna se despeña
por la cuenca de la noche
para anegarse en tus pupilas.
Y en el silencio sin verbo,
donde el tiempo se desviste,
tu presencia traza el mapa
de lo eterno.
— LMML.