Josué Jaldin

\"ALTAR DE ORUGAS\"

Y consumó la horfandad
mi corazón, un estentóreo
vacilante, en rauda crueldad...
En mi camisa, un ecuóreo.

Que meretrices me cocen
las pronunciadas arrugas...
¡Que divinas musas!, que nocen
el altar, que esbozan de orugas.

Marginal mi tes cabizbaja.
Devorada y dada, en tablero
de sanguijuelas sin raja
que vomitan al cordero.