Omar Reyes

Litio

Hubo una vez en que yo quería ser el mejor,
no había tormentas que pudieran derribarme,
o eso pensaba.

 

Pero llega el momento en que reflexionas,
ves a tu alma luchar por algo,
luchas por algo que no te dará felicidad.

 

Miras el pasado y piensas que todo fue en vano,
luchaste por nada,
luchaste para engañarte.

 

Inicias de nuevo,
inicias con miedo,
pero esta vez, haciendo lo correcto.

 

Del amor ni del arte se sobrevive;
del dolor se aprende a alzar la voz,
a superar los traumas, los recuerdos que hieren.

 

Pero la nostalgia y el peso de lo vivido
invaden tu mente,
tu alma, tu razón de ser.

 

Hacer lo “correcto” en nuestro pasado
no siempre lo es;
iniciar de nuevo duele, pesa,
como los clavos del salvador.

 

Y no es un renacimiento asegurado,
solo se pueden revivir las vivencias en las memorias,
se carga el peso y la herida del pasado.

 

Aunque mi corazón esté lleno de heridas,
y derrame litio,
seguiré arrastrándome hasta alcanzar lo que he soñado.

 

De mis errores vivo,
y supero, caigo y me arrastro.

 

Callo mi dolor en soledad,
ser débil
es destrucción para mi ser.

 

Pero aún entre dolor y llamas,
florezco entre sangre derramada por mis ojos.