Espejos Rotos
Ironía de la vida, querer domeñar el tiempo
en el centro mismo de la tierra.
Un espejo se quebró, el reloj se detuvo,
víctimas de las causas de la vida.
Te dije que pidieras un contrato,
una ilusión, la sabiduría ganada con los años.
Mas tú dijiste no, miedos en carpa blanca,
el temblor en la mano, copo de nieve en daño.
Mas tú no me defendiste por lo que había pedido,
Conocías la historia, el corazón ya herido,
y temías repetir el dolor pasado.
Por eso huiste a las noches de cantina,
a las promesas vacías bajo el mismo techo,
creyendo que la codicia te salvaría del vacío.
Hoy, el tiempo se ha detenido, el reloj calla,
más nada se resolvió, espejos rotos por doquier.
Solo traiciones trilladas, bolsillos vacíos,
alma en desolación, vicios que atan.
Falsas editoriales y pésimos editores,
libros ya deshojados, sueños rotos en mil pedazos.
Ya no te acaricia el amor, solo la noche,
mentira frustrada, camino errado.
Porque al final te demostró la verdad:
no quería reparar el daño, solo quería cobrarte...
a su manera.
Autor: Antonio Pais