Fue a medio cigarro
que pasó algo extraño,
fue un sentir raro.
Se me fue medio año
inmerso en soledad,
deseaba tanto un abrazo
y solo yo
me lo pude dar...
Aprendí que hay una vida,
una sola oportunidad
para ser vulnerable
y mostrar cuanto
puedo amar.
Cuanto amo a mi mamá,
cuanto a mis hermanos,
cuanto a mis abuelos
que ya no están,
cuanto a mi pareja
con quien me voy a casar,
cuanto a mi mascota,
a mi yoko sin igual.
Vida nueva,
problemas nuevos.
Lucho contra el espejo
y mis pecados de hierro,
el presionar donde
aún no llego
y no llorar en el intento.
Que las paredes
vestidas de invierno
se vuelvan un inferno
pues muestran
lo que llevo dentro,
sacan a la vista lo que
llevo noche a noche
escondiendo.
Acá soy una cara nueva
que voy descubriendo,
voy a veces contra el viento,
contra la fuerza del tiempo
pues ya pasaron siete meses y
aun recuerdo estarme
despidiendo.