Cuando al fin llegó el momento,
Ni el tuyo, ni el mío, mucho menos el nuestro.
Llegó el tiempo, ineludible e ineluctable,
El que no se mide ni se calcula, el que llega.
La hora precisa, precisa eventos desafortunados,
El tiempo los atrapa, los galvaniza.
Los eventos impregnan en la memoria su intangible naturaleza.
Llegó el tiempo, el que somete, el que construye peldaños para quién sepa armarse de valor.
18conejos