EN UN PAÍS CON POCA LLUVIA
En un país de lluvia poco abundante
maestro y aprendiz se alejan sin motivo, andan a la busca,
y ya cerca del fin del camino
polvoriento y de la tarde,
dan la vuelta, regresan al pueblo distraídos,
tontos y hambrientos, como dos formas
de vida a la deriva.
Y con paso firme aún y armoniosa rutina,
ya en la noche, regresan solitarios, enigmáticos
bajo el color blanco mortecino
de la luz de las farolas
que alumbran las avenidas.
Gaspar Jover Polo