Vas apareciendo,
un poco extraviada,
por la mañana,
nadie te cuida,
nada te detiene…
caes a tu paso,
parecieras más inocente…
te cruzas a mi ritmo,
dejando atrás el puente,
levedad es vencer el vértigo,
tú siempre te precipitas,
yo siempre tiemblo,
pese a tu compañía… llovizna.