J.ENOC_A

Envidia

La envidia en vida asesina

en un minuto, un momento.

 

Preguntó a aquel que arruina

un paseo en calles grises

por mirar a quién no cubre

su cuerpo y sin deslices

solo danza en una lluvia.

Celoso acude al desprecio

el precio: su vida enturbia

cual cual cuervo alaba las plumas

del pavo real, en silencio

sincero ataca a oscuras

arrancándole las plumas.

Pasado el tiempo y el suceso.

—Bellas son indudablemente

cada una de sus alas.

Oye de su compañero

y responde angustiado.

—¿Harás lo que yo he hecho?

—Lo envidio más lo admiro,

no causará el sufrimiento

que yo me vuelva más bello.