La imagen superior muestra el Santuario de la Madonna del Sasso, un famoso lugar de peregrinación en Locarno, Suiza.
A Patricia Sabag:
¡Levántate, vamos!
Musa y amiga,
exquisita rapsodia,
que tiene en Suiza
su cuna natal,
mas es su alma
el río de la lírica,
lluvia de sonrisas
que refresca la vida,
cuando más lo necesita.
Sueñas y nos haces soñar
en círculos de amor.
Navegas en alta mar,
reman tus versos
en su dimensión universal.
Tu luz, sol íntimo,
broncea el alma
y el color del sueño,
pintando tramas con fervor.
Letras que erizan
y conmueven por dentro,
estrujan vehemente
ritmos ardientes.
Odas, estelas que aparecen
y a la vez vencen el tiempo,
vuelven, nunca perecen.
Sentimientos inefables
que sólo tú
escribes y haces,
olas de tu virtud
que siempre bañan y amanecen.
Tu mágica pluma,
dictamen de tu corazón,
palpita y desnuda
el amor y la pasión.
Palabras que palpan y reviven
lo recóndito del ser,
su existencia,
que en un mundo insólito,
sacuden y entusiasman
el escabroso camino
de las desandanzas.
Por fortuna,
empinados pasos
qué de la álgida lírica
asumen la gesta,
bandera de libertad
y de la naturaleza.
Es la batalla de las letras,
el maravilloso mundo
de tu creatividad
que mueve el piso
y surge la oportunidad.
¡Impresionante!
Eres un sueño de amor
que trasnocha e inspira
versos de tu sabor.
Tus palabras,
un universo de ensueño,
donde las sombras
tienen voz
y el vacío palpita
con presencia sin temor.
Viaje hermoso por la trascendencia
del tiempo fecundo de tu poesía,
ser poético que resuena,
eco profundo
que se escucha,
donde existes,
motivando encuentros
galácticos y eternos.
Esos duendes de la utopía,
trozos de tu obra,
amor y filosofía,
elixir de la vida.
Epilogo
Eres en Poemas del Alma,
pedazo glorioso de tu fantasía,
de tu cosmos,
único y apoteósico.
En nosotros andas,
vivimos tu bella fronda
y lamentamos tu caída.
Hoy te lo decimos desde adentro...
Patricia te añoramos,
poeta te queremos,
maestra te necesitamos.
¡Levántate, vamos!
Vuelve a casa,
te esperamos,
excelsa y sana,
así lo proclamamos
y ante Dios, por ti, oramos.