De Marte o Venus, planetas lejanos
Nos quieren clasificar, como si roca
donde no hay vida, somos.
No soy de Marte y de Venus no eres
carne cuerpo y mente somos
genes de aquí y de allá
como todo humano.
Al dividirnos o clasificarnos en roles
prestablecidos, donde no fuimos consultados
nos encasillamos.
Porque no puede Marte sentir como Venus
o Venus amar como Marte.
Acaso no puede una mujer también ser sensible
y enamorar.
La mujer le pide al hombre que sea como Marte
y a la vez le pide roles de Venus, que lave, cocine o planche
y es un cambio excelente en el hombre, pero no podemos
pedir una cosa y excluir la otra.
Es mejor un mundo sin roles, donde en perfecto equilibrio
solo el amor una las partes en un todo y cada uno sea el otro.
No soy de Marte
No eres de Venus
Solo dos humanos con sus virtudes y debilidades.