Kmony QuiƱonez(monina)

Un vicio muy Terco

Amar, demonios, es un vicio terco,

una manía de buscarse en otros ojos,

un laberinto donde el corazón es ciego,

y la razón se ahoga en los antojos.

 

Amar es desnudarse hasta los huesos,

mostrar las cicatrices y las dudas,

es arder en el fuego de los besos,

y lamer las cenizas cuando escudas.

 

Amar es un pretexto, sí, lo sé,

una coartada para no estar tan solos,

un invento para darle un porqué

a este absurdo de vivir a solas.

 

Pero, carajo, qué bien se siente amar,

aunque duela, aunque queme, aunque desangre,

es la única forma de poder volar,

de sentir que la vida no es un desastre.

 

Amar es un suicidio consentido,

un pacto entre dos almas desoladas,

un grito en la noche, un latido,

una esperanza entre las madrugadas.

 

Así que ama, aunque te rompan el alma,

aunque te mientan, aunque te hagan daño,

porque al final, la vida es una calma

que solo se enciende con el extraño.