Manonle

El guerrero

A vuestra merced que de cien hombres Puedo ocuparme sin trabajo, Aunque me mantendrán ocupado, No conseguiré más que la victoria De saber que cien hombres lo han intentado Y todos ellos, uno por uno, han fracasado

 

El nuevo sol poniente

En el horizonte

Reluce incandescente

Como una antorcha

Encendida por Caronte

 

La victoria en mi mano y a vuestra merced

La enseño con mofa y descaro

Para que sus ojos, de nariz a nariz, lo vean

Y piensen el destino que le espera

 

Aléjese lo posible de mi fiero rey,

Con mi espada y escudo

Daré muerte a todo el mundo,

Pues corona usted lleva,

Pero mi acero en los confines suena.