Inspirado en el texto de Éxodo 24:9-18
Benditos Moisés, Aarón, Nadab y Abiú
sus pies en el embaldosado de zafiro
semejante al cielo y su suspiro
vieron a Dios, en sus nubes de tisú...
Bajó a ellos, la bebida y el pan otorgó,
los mortales le vieron, cenaron con Él,
Moisés levantaba la copa de Miel,
vino Dios, y sus palabras pronunció...
¡Palabras sacras de los Labios Divinos,
fuertes como rayos, dulces como trinos
tan audibles para el oído humano!
Daría a Moisés el testamento vivo
las tablas santas, el bello olivo
formadas por sus labios, y su mano...
Annabeth Aparicio de León
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