pavlo

Mi Sueño

Muy amada mía, es preciso contarte lo que siento por ti,
para mí eres un signo de interrogación
rodeado de ojos y de fuego.

Eres la poesía más pura que me gustaría leer y aprender.
No soy poeta ni escritor,
pero entiende, corazón, que cada pensamiento,
cada palabra, cada letra que se me ocurre a la mente son para ti.

Tú eres mi significado, mi lógica, mi razón;
en ti entiendo que la poesía puede ser escrita con tu nombre,
que la ternura puede ser alimentada con tu mirada, con tu voz,
que el encanto solo puede ser encantado
si se trata de tu suave hechizo de amor,
y que la melodía que rodea mis oídos
es armonía causada por tus dulces palabras.

Creí en la ternura cuando escuché tu voz,
fue canto, melodía y un encanto,
en tanto comenzaste a murmurar notas de suavidad y blandura,
cual mordida de un malvavisco que fue primero candor
para ser amor en su interior.

Dentro de mí siento que te llevo soñando desde hace mucho tiempo,
y que ese sueño no ha hecho más que solo alimentar mi deseo.

Te quiero y realmente quisiera tenerte,
quisiera morirme en la curva de tu sonrisa,
quisiera contar cada uno de tus lunares,
quisiera vivir en el umbral de tu mirada,

quisiera leerte como si fueses la última página de un libro.
No hay cielo que no pueda ver sin imaginarte.

Pues sucede que, en infinidades de sueños,
te sueño.
Pasa que, en infinidades de vidas contigo,
me muero.
Pasa que, entre tantos libros,
te leo,
te deletreo, sin verte,
te deseo.

Y,
aun muerto corazón,
siempre serás mi sueño.