La razón torcida, la mentira ingrata,
todo te maltrata como cruel herida
que quita la vida, porque también mata
y hasta te remata, como piel molida.
La razón se oxida como vieja lata
cuando siempre es grata la mentira crida
que va convencida con palabra innata
y aunque te maltrata termina ella hundida.
La razón no vive donde faltan sesos
aunque los sucesos sean contundentes
porque es de valientes ser de carne y huesos
cuando son confesos de apoyo a las gentes
con voces silentes cuando viven presos
de los muchos pesos que son muy crecientes.