HINCHA CON BANDERA AL LADO
Era un hincha arrimado a una bandera
con los colores y el escudo
de su equipo de fútbol, que agitaba
los domingos mientras duraba el partido
confeccionando en el aire, y sin darse tregua un momento,
la mitad de un remolino. Era un hincha disciplinado y metódico
coherente con sus ideas, un hincha eufórico y también estoico
al que el amor por su escudo dotaba de fuerza extra,
de energía adicional tanto dentro
como fuera del estadio,
tanto en los días dolientes
como en los otros, los alegres y festivos.
Los días de entre semana la guardaba
en un lugar preferente del altillo,
limpia, planchada, con el color reobrado,
y de vez en cuando subía a verla
unos segundos, un minuto, pues era como
mantener la ilusión en todo lo alto.
Gaspar Jover Polo