poeta in processus

Me destruye

Odio el silencio.

El que grita por acabarse

El que busca solo suspiros, sollozos.

Que rebota entre paredes y ventanas esperando hacer un mínimo ruido.

No cualquier silencio.

Este silencio. El mio. El nuestro.

El que crece aun más.

En la precaución, en el final, en la monotonía.

En pensar que se hacen las cosas por constumbre. No por cercanía.

En esperar que se haya roto algo.

Que no pueda pegarse, ni siquiera con hilillos de oro. 

Odio el silencio que se transforma en ira, en llanto, en crisis.

En el eco de un final feliz que no se siente.

En uno que no acaba, que no se extingue.

Que yace en el infinito y resuena día a día.

El silencio más ensordecedor. 

Que crece, incomoda y tensiona.

Limita y rompe.

Destruye.

Este silencio. Mi silencio. Nuestro silencio.