Para qué rogarte otra vez, se acabó
este tonto que andaba tras de vos,
acaso eres la única mujer en este
mundo ,no vengas con tus celos que
aquí no estás en tu casa, estás en
la mía.
Como decía mi abuelita:
Vuela pajarito que aquí no hay
nido para vos, y eso me hacía reír
porque hoy gozo de no estar en tu
casa donde padecí de tanta tristeza
en el amor .